sábado, 17 de agosto de 2013

Soy Insomnio


Trasnochada miro el gran ojo luminoso.
Me observa con un ronroneo parsimónico
mientras mis entrañas se acurrucan
en el fondo de mi torso encorvado.

Lo veo, y su mirada pálida me contesta
hablándome como una flecha certera
por la evidencia de este momento.
Y me obliga a admitirlo:

"Eres pasto del insomnio"

Y el crepitar de su cerebro se une al mío
en un mudo vals de horas huecas.