miércoles, 25 de diciembre de 2013

Cosmogonía del exilio


Hipocresía 
alzó entre sus brazos de cal a 
Máscara
y ésta, serena y firme,
derrocó del trono a 
Bondad.
Por eso ella huyó de la bóveda celeste,
porque comprendió su metamorfosis
de golondrina a tierra infértil.
Y así, marchó hacia un exilio 
en el que hacía mucho tiempo
que vivía 
Esperanza.


miércoles, 27 de noviembre de 2013

Escala


La última vez que te vi
bailabas con los lápices
de un futuro cuadro
sin espíritu.

Ahora eres por fin,
y justamente,
un folio
en
blanco.

martes, 8 de octubre de 2013

Dolor


Sacar a pasear el alma,
para que respire aire sin dolor,
como el que guarda el pecho
que presa la tiene.


domingo, 29 de septiembre de 2013

Metrónomo


Si no puedo acallar
los llantos
de mi pasado
saldré a la vida a gritar
las melodías
de mi presente.

viernes, 20 de septiembre de 2013

Solo el viento


A partes iguales 
la alegría y la rabia
inundan el aire, 
turnándose como gentiles 
combatientes, 
cambiándolo todo 
en un golpe de veleta.

sábado, 17 de agosto de 2013

Soy Insomnio


Trasnochada miro el gran ojo luminoso.
Me observa con un ronroneo parsimónico
mientras mis entrañas se acurrucan
en el fondo de mi torso encorvado.

Lo veo, y su mirada pálida me contesta
hablándome como una flecha certera
por la evidencia de este momento.
Y me obliga a admitirlo:

"Eres pasto del insomnio"

Y el crepitar de su cerebro se une al mío
en un mudo vals de horas huecas.

lunes, 20 de mayo de 2013

Un titular en el aire



Aunque las noticias no lo cuenten, 
hoy grita, invisible, un titular en el aire.

Ella ha ganado.

Bailando me llevó entre sus manos saladas,
y tú solo sabrás el final del cuento
mientras la jauría de lobos celebre banquetes
sobre lo que quedó de la caperucita roja
a la que al fin ganó la tristeza.

viernes, 29 de marzo de 2013

Tu efigie


Arráncame el talle de tu efigie
de detrás de mi memoria,
porque la escultura ya no es más firme
que mis deseos de ser libre.


miércoles, 6 de marzo de 2013

Cadáver exquisito


Cadáver me siento
entre vuestras manos vivas
y tinta electrónica muerta.

Cadáver.

Soy nueva aquí y me siento vieja,
cadáver.
Me presento y os saludo
con mi calavera sonriente.

Ser buenos conmigo,
seré malvada con vosotros.
Viceversa y vice-verso.
Como gustéis. Bebed.

sábado, 16 de febrero de 2013

El justo




En el valle de la herida los pulmones elevaron solo dos palabras hacia sus labios: 

- ¿Por qué? - El terror se acomodó en la tráquea del intocable.

- Porque el mundo a veces es justo - dijo entonces - y destierra a los monstruos que, como tú, sobreviven ocultos tras máscaras de leyenda.

El dragón se alejó lentamente, mientras la armadura de aquel caballero que una vez creyó ser perfecto y moral se balanceaba con el último suspiro.

sábado, 19 de enero de 2013

La cacería



Mi hermana y yo cenábamos en una mesa blanca en medio de la noche, en un jardín con césped. Nos iluminaban farolas encaramadas sobre los muros de piedra de la finca, como pequeños ojos amarillos sin cuerpo. Las dos éramos a veces niñas y a veces de nuestra edad actual, y sin que tal truco nos turbase, comíamos con avidez la carne que rebosaba en nuestros platos. Su jugo era sabroso y cálido, pero cuando nos dimos cuenta comprendimos que aquel manjar era carne de gato.

Sobre la mesa descubrimos de pronto la piel de los animales, seca y crujiente al tacto. Mi hermana no me creyó cuando le advertí con horror la naturaleza del plato. La piel de su gato brillaba bajo la luz de las farolas. Tenía una hebilla de cinturón dorada atravesando su frente, simbolizando que esa piel se usaría para hacer ropa, sabedora de su destino antes del desenlace.

Me levanté de la mesa y corrí por el jardín retorciéndome de angustia contenida. Al otro lado de una valla descubrí a mi madre en la parte trasera de una casa. Un campo pequeño y cuadrado de césped alto despedía un verde intenso bajo tres focos. Mi madre cazaba gatos salvajes con un largo palo, les golpeaba la cabeza y caían como pequeñas hojas a sus pies. El sabor de la pesadilla se abría camino en mi garganta, recordándome la sensación de otras jornadas de trance. Traté de detenerla pero se negaba, clavando su mirada en los movimientos veloces que trazaban los felinos pasando como estrellas fugaces a través de la espesura. "Es para alimentaros, para alimentaros, hija mía", me decía mi madre una y otra vez con ojos aguados y obsesivos.

Con locura rábica surqué el campo y alcancé a coger un gatito. Lo alcé ante mi madre y le dije: "Son gatos y ni tú has sabido reconocerlos." Ella quedó congelada, con el palo abatido sobre el suelo y el pequeño felino que había cazado, lánguido, caído en su mano izquierda.

La noche continuó silenciosa a nuestro alrededor, y los gatos quedaron allí, danzando como mariposas erráticas entre la hierba alta.

lunes, 7 de enero de 2013

Iberia (2005)


Me apetecía probar con un campo que conociera poco y me he adentrado en Iberia, un precioso documental-sesión de baile a modo de teatro que cuenta con las más altas estrellas del flamenco.

Pero es que además está dirigido por Carlos Saura, por lo que no puede mas que ser una obra de calidad que desde el primer minuto hechiza con el uso de la luz, el color y la composición.

Cuando se escucha buena música de éste género, a niveles profesionales y se ve bailar a maestros, resulta una experiencia ciertamente maravillosa e inspiradora.

domingo, 6 de enero de 2013

Roméo et Juliette (2002)


Escuchar una canción es añorarlo y que desemboque en que vuelva a verlo una vez más. La primera vez que disfruté de él fue en una clase de francés cuando estaba en el instituto. Es una excelente manera de aprender, la verdad. Decenas de veces lo he disfrutado, siempre en francés con subtítulos en francés, ahora lo he conseguido con subtítulos en español y ciertas palabras que no entendía por fin las he comprendido.

¿Qué decir de él? Los musicales franceses nunca me han defraudado, y al igual que el de Notre Dame de Paris (1999). Está grabado en teatro, y eso le da un encanto adicional a la vez que demuestra que el directo es magia, es maravilla.

Haciendo una breve comparativa, opino que Broadway es esplendor, energía, pero los musicales de teatro franceses  son un derroche de sentimientos engarzados de perlas, delicados y con melodías más dramáticas y pasionales.

martes, 1 de enero de 2013

Nana a Victoria

Canta, madre, canta
ahora que aún tiene los ojos abiertos.
Canta, madre, canta.
Cuando los dos haya cerrado
solo serás un recuerdo
y ella reina de mil reinos.

Duerme, niña, duerme
para que seas pronto coronada.
Duerme, niña, duerme.
A ti quiero imaginar vestida en plata,
y en una corte de flores silvestres 
que resuene tu risa encantada.

Canta, madre, canta,
ahora que dormida está en tus brazos.
Canta, madre, canta.
Cuando despierte de nuevo
su castillo será el pasado
y tu beso su mayor regalo.